Retroanálisis: Blast Corps (1997)

¡Demole y destruye todo lo que se encuentre a tu paso con Blast Corps, la última joya de estrategia y acción de Rare! El retroanálisis, como siempre, a continuación.

¡Tunda!

Con una combinación de acción frenética, puzzles y elementos de estrategia, Rare nos trajo un título de acción a raudales en el que, formando parte de un equipo de demolición, nuestra misión consistirá en despejar nivel a nivel toda clase de estructura molesta que se nos ponga por delante. Ya sea destruyendo una ciudad bloque a bloque a saltos desde el cielo, como con bulldozers, camiones, grúas, cyborgs..  nuestra misión por lo general, consistirá en arrasar todo lo que esté ante el paso de un camión a punto de explotar, en destruir estructuras en un límite de tiempo, en liberar a los supervivientes encerrados en los edificios y en ganar el máximo número de dinero posible con cada demolición.

Con esta temática tan original e innovadora, nos encontraremos con un juego con un apartado gráfico que destaca por su calidad. Con una perspectiva superior, manejaremos a nuestro personaje y vehículos a través de un entorno gráfico enteramente tridimensional y poligonal de alta calidad, con escenarios cerrados pero de gran tamaño, y con una destacable y total ausencia de niebla durante el juego. Por otra parte, es de notar la calidad de los golpes, explosiones y derrapes de nuestros vehículos; destacando el juego por las impactantes destrucciones de edificios y estructuras que realizaremos constantemente.

Este será el puto camión rojo que
nos dará continuamente por culo
durante el juego.

El apartado sonoro, destaca por un uso de explosiones, sonidos de motor y demás FX, de una calidad y variedad altísima, por lo que pocas veces -salvo que estéis jugando al juego horas y horas, algo que probablemente os pasará- os encontraréis con la situación de que ciertos sonidos os resulten repetitivos. En cuanto a la banda sonora, nos encontramos con un título que destaca por el uso variado de melodías al más puro estilo arcade, cargadas de acción y golpes de bateria como si de una peli de acción de los setenta/ochenta se tratara.

¿Optimus Prime?

La jugabilidad, es el punto más importante del título. Nos encontraremos, como repito, con un juego de acción a raudales, corto, pero en ocasiones cargado de una dificultad que nos pondrá los pelos como escarpias. Ello, lo veremos reflejado en los constantes niveles cargados de estructuras a destruir en tiempos tremendamente limitados, así como en la dificultad que nos pondrá el juego en ocasiones a la hora de controlar ciertos vehículos para poder superar el nivel en cuestión. Un juego frenético, en el que elementos como la excelente cámara automática, nos facilitarán enormemente nuestra labor de destruir todo lo que se nos ponga por delante, así como la intuitiva -pero a practicar mucho- conducción de ciertos vehículos del juego.

Si a eso le añadimos la posibilidad de poder repetir cada nivel - una vez superado éste - para encontrar determinados secretos, destruir más y más estructuras por amor al arte -y al dinero que ello nos proporcionará-, así como las ganas de hacer el cafre por hacer el cafre; nos encontraremos con un juego fabuloso que nos lo hará pasar bomba, cuyo único drama, es el no haber recibido ninguna secuela desde 1997; quedándose Blast Corps perdido en los noventa, como los perdidos...

Conclusión final: Juego de auténtico sobresaliente para las mentes más espabiladas y amantes de decidir qué cable cortar; si el rojo o el azul. Alto en su difícultad y corto, pero un título con el que os quedaréis con las ganas de repetir, pese a su total ausencia de multijugador. Compradlo, es un clásico irrepetible.

LO MEJOR

- Su planteamiento innovador y original, así como su combinación de acción, puzzles y estrategia.

- Su apartado técnico.

- Su nivel de adicción.

- Poder repetir cada nivel cuantas veces quieras, sin ninguna clase de presión.

LO PEOR

- No posee modo Rumble Pack, como tantos títulos de 1997.

- No posee multijugador.

VALORACIONES

-Gráficos: 9,3

-Sonido: 8

-Jugabilidad: 9,5

-Duración: 9,2

-NOTA FINAL: 9